El mentoring es una poderosa herramienta que impulsa el aprendizaje y el desarrollo de competencias clave, no solo para la empleabilidad sino también para la vida cotidiana. A través de una relación de aprendizaje sólida y significativa, el mentoring permite a las personas adquirir conocimientos, habilidades y perspectivas que les ayudarán a crecer tanto personal como profesionalmente. En este artículo, exploraremos en detalle qué es el mentoring, cuáles son sus objetivos y competencias clave, y cómo se diferencia del coaching. También intentaremos definir el papel que juegan las habilidades blandas en el ámbito de la Formación Profesional.
¿Qué es el mentoring y cómo se define?
Para comprender qué es el mentoring en la formación y desarrollo de competencias, es fundamental tener una definición clara del concepto. El mentoring se refiere a una relación de aprendizaje en la cual una persona con experiencia y conocimientos (el mentor) guía y apoya a otra persona (el aprendiz) en su crecimiento personal y profesional. A través de esta relación, el mentor comparte su experiencia, conocimientos y perspectivas, brindando orientación y retroalimentación constructiva al aprendiz.
Esta relación se basa en la transferencia de conocimientos y experiencias del mentor al aprendiz, con el objetivo de fomentar su crecimiento y desarrollo personal y profesional. El mentor actúa en beneficio del aprendiz, para que este logre desarrollar una serie de competencias que le serán de utilidad en su futuro. En PRO2 estarás acompañado de un mentor/tutor desde tu incorporación que te ayudará a crecer en todos los ámbitos, diseñar tu aprendizaje, descubrir las oportunidades y ayudarte a tomar decisiones adecuadas para tu desarrollo personal y profesional.
Diferencias entre mentoring y coaching
Aunque el mentoring y el coaching comparten algunas similitudes, también existen diferencias significativas entre ambos enfoques.
Mientras que el coaching se centra principalmente en ayudar a las personas a alcanzar metas específicas y desarrollar habilidades técnicas, el mentoring abarca un enfoque más amplio que incluye el desarrollo personal y profesional.
Quizá la diferencia más significativa es que el mentoring se basa en una relación asimétrica, donde el mentor aporta su experiencia y conocimientos, mientras que el coaching se basa en una relación igualitaria donde el coach y el coachee trabajan juntos en un proceso de colaboración y descubrimiento.
Objetivos del mentoring en la formación y desarrollo de competencias
El mentoring tiene como objetivo principal potenciar la formación y el desarrollo de competencias de los aprendices. A través de esta relación de aprendizaje, se busca mejorar el aprendizaje práctico y la aplicación de conocimientos.
Uno de los objetivos clave del mentoring es mejorar la capacidad de los aprendices para aplicar de manera efectiva los conocimientos adquiridos en situaciones reales. Es importante destacar que el mentoring impulsa el crecimiento y desarrollo profesional al proporcionar a los aprendices la orientación y retroalimentación de manera constante, algo necesario para alcanzar sus metas y aspiraciones.
Adquirir conocimientos teóricos únicamente no es el objetivo final del mentoring, sino que es fundamental aprender a utilizar estos conocimientos de manera efectiva en situaciones reales. Esto se potencia cuando el mentor comparte experiencias y ejemplos prácticos, proporciona orientación en la resolución de problemas y ayuda al aprendiz a desarrollar habilidades específicas relacionadas con su campo de interés.
El mentoring busca impulsar el crecimiento y desarrollo profesional de los individuos involucrados. A través de la relación mentor-aprendiz, se proporcionan oportunidades para el desarrollo de habilidades blandas, la adquisición de conocimientos especializados y la ampliación de la red de contactos profesionales. En esta relación estrecha, el mentor está continuamente presente compartiendo su experiencia y proporcionando retroalimentación. Este enfoque en el crecimiento profesional ayuda al aprendiz a alcanzar su máximo potencial y a progresar en su campo elegido.
Competencias clave a desarrollar para lograr un perfil integral
Según diversas fuentes (como el Foro Económico Mundial, Fundación Bertelsmann, Fundación Telefónica, McKinsey Global Institute), los perfiles profesionales del futuro van a requerir una serie de competencias complementarias a los conocimientos técnicos que aporten valor a su perfil.
Habilidades como Capacidad Analítica, Pensamiento Crítico, Creatividad, Aprendizaje Activo, Proactividad, Liderazgo, Habilidades en Resolución de problemas o Competencias Emocionales Avanzadas son algunas de ellas.
Habilidades de comunicación efectiva
Por ello, el mentor debe ser capaz de comunicarse de manera clara y efectiva, transmitiendo sus conocimientos y experiencias de manera comprensible y motivadora para el aprendiz. Asimismo, la capacidad de escucha activa y la empatía son habilidades fundamentales para el mentor.
Al escuchar activamente al aprendiz y mostrar empatía hacia sus preocupaciones y necesidades, el mentor crea un ambiente de confianza y comprensión que facilita el proceso de aprendizaje y desarrollo. También, debe ser capaz de adaptar su estilo de comunicación según las necesidades del aprendiz, evitando jergas o tecnicismos excesivos.
Una comunicación efectiva fomenta una relación sólida y facilita el intercambio de ideas y retroalimentación constructiva, necesaria para lograr el éxito en un proceso de mentoring.
Capacidad de escucha activa y empatía
Una de las habilidades principales que el mentoring requiere es la capacidad de escucha activa y empatía por parte del mentor. El mentor debe estar presente y atento a las preocupaciones, necesidades y metas del aprendiz. La escucha activa implica prestar atención de manera intencional, estar atento a las emociones que subyacen a la información compartida, hacer preguntas clarificadoras y demostrar interés genuino en lo que el aprendiz tiene que decir. La empatía, por su parte, implica comprender y compartir las emociones y experiencias del aprendiz, lo que fortalece la confianza y la conexión entre ambas partes.
El papel del mentor, por tanto, es también brindar un ejemplo en tiempo real, mostrando con su aprendiz todas estas competencias (entre las que se engloban las Competencias Emocionales Avanzadas como Resiliencia, Flexibilidad, Comunicación o Trabajo en Equipo.
El mentor desempeña un papel fundamental al proporcionar orientación y retroalimentación constructiva al aprendiz. A través de la orientación, el mentor brinda dirección y apoyo al aprendiz, ayudándolo a establecer metas claras y diseñar estrategias para alcanzarlas. La retroalimentación constructiva, por su parte, permite al mentor ofrecer comentarios y sugerencias para mejorar el desempeño y el desarrollo del aprendiz. Esta combinación de orientación y retroalimentación permite a los aprendices adquirir nuevas perspectivas y desarrollar habilidades de manera más efectiva.
Enfoque en el desarrollo personal vs. desarrollo profesional
A diferencia del coaching, el mentoring no se enfoca únicamente en el desarrollo profesional, sino que también considera el desarrollo personal del aprendiz. Además de brindar orientación en el ámbito laboral, el mentor busca que su aprendiz logre desarrollar efectivamente su autoconfianza, la gestión del tiempo, el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y otros aspectos que afectan el crecimiento personal en general. Este enfoque integral contribuye a un desarrollo más completo y equilibrado del aprendiz. Para esto, es fundamental que los mentores estén formados y hayan adquirido de manera sólida estas habilidades.
Relación asimétrica vs. relación igualitaria
En el mentoring, la relación entre el mentor y el aprendiz es asimétrica, lo que significa que el mentor aporta su experiencia y conocimientos para guiar al aprendiz. Existe una diferencia en el nivel de experiencia y autoridad entre ambas partes, lo que permite al mentor ofrecer una perspectiva y orientación valiosa. Aunque la relación es asimétrica, esto no significa que el aprendiz no tenga voz ni participación activa. El mentor debe crear un ambiente de confianza y apertura donde el aprendiz se sienta cómodo expresando sus ideas y metas.
Mientras que el mentoring se centra tanto en el presente como en el futuro, el coaching tiende a enfocarse más en el futuro y en el logro de metas a largo plazo. El mentoring busca brindar apoyo y guía en el presente, ayudando al aprendiz a desarrollar habilidades y conocimientos relevantes para su crecimiento personal y profesional actual. Sin embargo, también tiene en cuenta las metas y aspiraciones futuras del aprendiz, brindando perspectivas y orientación para su desarrollo a largo plazo.
El programa de Mentoring PRO2 llevará una evaluación inicial e interna tanto a los alumnos como a profesores. Este programa se llevará a cabo en la primera sesión de FOL de cada módulo de todas nuestras titulaciones. En el Grado Superior de Administración y Finanzas se hará en el módulo de Recursos Humanos y RSC. La plataforma con la que se trabaja es Habilmind. Con la información de esta evaluación se elaborará un perfil personalizado y unas recomendaciones específicas. Además, el profesorado tendrá un programa de Educación Emocional.
Los alumnos PRO2 podrán participar en ferias, eventos lúdicos y visitas de expertos. A su finalización, podrán ver las habilidades más relevantes y el seguimiento de todos sus logros durante el curso.
El mentoring tiende a tener un alcance más amplio y una duración más prolongada en comparación con el coaching. Mientras que el coaching a menudo se enfoca en metas y objetivos específicos a corto plazo, el mentoring busca un desarrollo más completo y a largo plazo. El mentoring implica una relación continua entre el mentor y el aprendiz, que puede extenderse durante meses o incluso años, a medida que el aprendiz adquiere conocimientos y habilidades a lo largo del tiempo.
Conclusiones finales: Maximizando el potencial del mentoring en la formación y competencias
El mentoring se presenta como una valiosa herramienta para potenciar la formación y el desarrollo de competencias. Mediante el establecimiento de una relación cercana y firme, el mentoring permite a los individuos adquirir conocimientos, habilidades y perspectivas que los ayudarán a crecer personal y profesionalmente. Con competencias clave como las habilidades de comunicación efectiva, la capacidad de escucha activa y la empatía, los mentores pueden brindar orientación y retroalimentación constructiva, impulsando el desarrollo de los aprendices. Gracias a los mentores, podemos complementar la formación meramente académica del alumnado, brindándoles la oportunidad de desarrollar habilidades blandas que serán altamente demandadas en el futuro.
Estudiar en el Campus PRO2 es todo una ventaja, porque aprenderás a liderar tu desarrollo profesional y desarrollarás tus habilidades y competencias que te permitirán conectar con el éxito con el mundo profesional.
En PRO2, el equipo de Orientación & Talento estarán encantados de ayudar a orientarte en tu carrera profesional. Más información en www.pro2fp.es o contactar al 636 318 413 o escribiendo un correo a admisiones@pro2fp.es
Matrícula Abierta
